El pasado día 21 de mayo salió publicado en Dos Hermanas Diario Digital el texto que una madre compartió a través de WhatsApp tras asistir a una charla que la Policía Nacional ofreció en un colegio de Dos Hermanas en el que se alertaba de los peligros que podría conllevar su uso. En relación al mismo, un lector, identificado como Evaristo, responde para pedir que no se demonice a internet y destacar las ventajas que ofrece.
Tengo 24 años y esta es mi opinión en respuesta al artículo 'Impresiones de una madre que asistió a una charla sobre los riesgos de internet en los niños'. Pensaba hacerlo en un comentario, pero era tan extenso que preferí que fuese un artículo de opinión enviado a Redacción.
Comenzaré con: "Así es, os han metido el miedo en el cuerpo". Está bien saber qué puede ocurrir, pero creo que la prohibición no es la solución.
Con 15 ó 16 años, un niño sale hoy día a la calle y pide ciertas 'libertades', como recogerse a las 12:30 ó 01:00 horas, como mínimo. Sería una tontería renunciar a tener contacto con un adolescente cuando salga, enviarle un WhatsApp para saber cómo está, dónde está o con quién está. Si miráis a vuestro alrededor, es típico que un joven con 15 ó 16 años ya fume cachimba con consentimiento de sus padres, beba alcohol e incluso conduzca su propio ciclomotor, pero vemos el problema en que tengan un móvil propio. Pero esto ya es otro tema.
Controlar sus redes sociales podría servirnos para saber qué hace, dónde y con quién se junta.
Por otra parte, en este tipo de charlas deberían dar unos folletos informativos con un pequeño resumen, ya que entre que suele ser un tema desconocido para padres y madres y que se explica rápido..., puede haber confusiones.
Instagram no publica la ubicación a no ser que tú utilices esta opción introduciendo el nombre de la ubicación. Ahí podrás introducir el nombre de la ciudad, un comercio cercano e incluso, si lo deseas, el nombre de la ciudad de Dubai. Pero, por defecto, no se publica nada referente a tu ubicación ni se guarda de forma pública. Sí puede ocurrir con Twitter, que permite compartir la ubicación precisa, pero que igualmente no se hace de manera automática y ha de hacerse de manera intencionada.
Un delincuente no puede acceder a un grupo de WhatsApp sin permiso de un administrador. Un administrador es el único que podrá añadir a alguien al grupo y cuando lo haga será notificado el resto de usuarios del grupo. Bien puede referirse a que un delincuente pudiese ver lo que se enviaba a través de la aplicación WhatsApp. Hasta hace poco, WhatsApp no cifraba sus datos; esto quiere decir que a través de una WiFi sin contraseña o con una contraseña que conociese el delincuente podría obtener información que se enviase a través de la aplicación. Esto ya no es posible.
Conforme al resto de párrafos, conforme por lo general.
Mi opinión respecto a estas charlas es que se hace bien por informar de los riesgos, pero se demoniza a un medio que incluye muchas otras ventajas. Si los padres no tienen conocimiento de internet, serán reticentes a que su hijo lo use. De esta manera su hijo no conocerá, por ejemplo, la mayor enciclopedia libre como es la Wikipedia y que le ayudará a estudiar o realizar tareas. Tampoco conocerá un amplio abanico de información referente a sus hobbies o gustos. Además, podemos vetar su interés por nuevos conocimientos como los miles de cursos gratuitos que hay para niños de todo tipo de temática.
Y esto lo hacéis sin querer, porque no tenéis la suficiente información sobre internet y solo os han contado los riesgos. Por eso creo que debería de hacerse, de forma paralela, charlas de internet para padres.
Yo crecí con acceso a internet desde los 11/12 años. Mis padres, por su edad, no conocían el medio y aunque al principio me supervisaban, pocos consejos pudieron darme. No había redes sociales ni WhatsApp, pero sí chats públicos con gente categorizada por 'canales' según gustos, provincias o ciudades, así como páginas webs para conocer a gente de muchas edades y con muchas intenciones.
Entrando en otro tema, es y será habitual que en televisión se hable del peligro de internet e incluso se haga hincapié en que ciertos hechos han ocurrido por internet. Para mí es normal, están comiéndoles su mercado y con ellos la inversión en publicidad que hacen las grandes empresas. Ahora, mucho público en vez de sentarse delante de la TV coge su móvil para ver vídeos en YouTube, consultar Facebook, ver la actualidad en el formato (vídeo, audio, escrita...) y en el medio que desean (página web, Twitter, Facebook...).
Para finalizar, uno de mis mejores amigos lo conocí gracias a internet hace unos once años y, además, él es trece años mayor que yo.
Tengo 24 años y esta es mi opinión en respuesta al artículo 'Impresiones de una madre que asistió a una charla sobre los riesgos de internet en los niños'. Pensaba hacerlo en un comentario, pero era tan extenso que preferí que fuese un artículo de opinión enviado a Redacción.
Comenzaré con: "Así es, os han metido el miedo en el cuerpo". Está bien saber qué puede ocurrir, pero creo que la prohibición no es la solución.
Con 15 ó 16 años, un niño sale hoy día a la calle y pide ciertas 'libertades', como recogerse a las 12:30 ó 01:00 horas, como mínimo. Sería una tontería renunciar a tener contacto con un adolescente cuando salga, enviarle un WhatsApp para saber cómo está, dónde está o con quién está. Si miráis a vuestro alrededor, es típico que un joven con 15 ó 16 años ya fume cachimba con consentimiento de sus padres, beba alcohol e incluso conduzca su propio ciclomotor, pero vemos el problema en que tengan un móvil propio. Pero esto ya es otro tema.
Controlar sus redes sociales podría servirnos para saber qué hace, dónde y con quién se junta.
Por otra parte, en este tipo de charlas deberían dar unos folletos informativos con un pequeño resumen, ya que entre que suele ser un tema desconocido para padres y madres y que se explica rápido..., puede haber confusiones.
Instagram no publica la ubicación a no ser que tú utilices esta opción introduciendo el nombre de la ubicación. Ahí podrás introducir el nombre de la ciudad, un comercio cercano e incluso, si lo deseas, el nombre de la ciudad de Dubai. Pero, por defecto, no se publica nada referente a tu ubicación ni se guarda de forma pública. Sí puede ocurrir con Twitter, que permite compartir la ubicación precisa, pero que igualmente no se hace de manera automática y ha de hacerse de manera intencionada.
Un delincuente no puede acceder a un grupo de WhatsApp sin permiso de un administrador. Un administrador es el único que podrá añadir a alguien al grupo y cuando lo haga será notificado el resto de usuarios del grupo. Bien puede referirse a que un delincuente pudiese ver lo que se enviaba a través de la aplicación WhatsApp. Hasta hace poco, WhatsApp no cifraba sus datos; esto quiere decir que a través de una WiFi sin contraseña o con una contraseña que conociese el delincuente podría obtener información que se enviase a través de la aplicación. Esto ya no es posible.
Conforme al resto de párrafos, conforme por lo general.
Mi opinión respecto a estas charlas es que se hace bien por informar de los riesgos, pero se demoniza a un medio que incluye muchas otras ventajas. Si los padres no tienen conocimiento de internet, serán reticentes a que su hijo lo use. De esta manera su hijo no conocerá, por ejemplo, la mayor enciclopedia libre como es la Wikipedia y que le ayudará a estudiar o realizar tareas. Tampoco conocerá un amplio abanico de información referente a sus hobbies o gustos. Además, podemos vetar su interés por nuevos conocimientos como los miles de cursos gratuitos que hay para niños de todo tipo de temática.
Y esto lo hacéis sin querer, porque no tenéis la suficiente información sobre internet y solo os han contado los riesgos. Por eso creo que debería de hacerse, de forma paralela, charlas de internet para padres.
Yo crecí con acceso a internet desde los 11/12 años. Mis padres, por su edad, no conocían el medio y aunque al principio me supervisaban, pocos consejos pudieron darme. No había redes sociales ni WhatsApp, pero sí chats públicos con gente categorizada por 'canales' según gustos, provincias o ciudades, así como páginas webs para conocer a gente de muchas edades y con muchas intenciones.
Entrando en otro tema, es y será habitual que en televisión se hable del peligro de internet e incluso se haga hincapié en que ciertos hechos han ocurrido por internet. Para mí es normal, están comiéndoles su mercado y con ellos la inversión en publicidad que hacen las grandes empresas. Ahora, mucho público en vez de sentarse delante de la TV coge su móvil para ver vídeos en YouTube, consultar Facebook, ver la actualidad en el formato (vídeo, audio, escrita...) y en el medio que desean (página web, Twitter, Facebook...).
Para finalizar, uno de mis mejores amigos lo conocí gracias a internet hace unos once años y, además, él es trece años mayor que yo.
DH DIARIO DIGITAL / REDACCIÓN
