La crisis por la que atraviesa Abengoa ha hecho que su banca acreedora, que le otorgó en su momento el crédito para la construcción del complejo de Palmas Altas, esté presionando a la Universidad de Loyola para que se quede con los siete edificios que la componen, lo que supondría, en ese supuesto, abandonar la posibilidad de levantar su campus en Dos Hermanas, según ha informado el medio 'andaluciainformación.es'.
El pasado mes de abril, el rector de la Universidad de Loyola, Gabriel Pérez Alcalá, y el alcalde de Dos Hermanas, Francisco Toscano, comparecieron de forma conjunta para despejar dudas en torno a la posibilidad de que dicha institución privada renunciara a levantar su campus en el término de Dos Hermanas y se estableciera de forma definitiva en Palmas Altas, donde en la actualidad ocupa ya tres edificios.
Por entonces, el rector de la Loyola fue claro: "En 2018 necesariamente tenemos ya que salir de Palmas Altas, porque no vamos a caber". Que era una forma de indicar que para el comienzo del curso universitario de ese año ya estarían abiertas las puertas y aulas de dicho campus nazareno.
Pero una cosa son estas palabras y otra las presiones que, según ha publicado el digital 'andaluciainformacion.es', está ejerciendo en las últimas semanas las entidades financieras -especialmente Caixabank y Banco Popular- que en su momento otorgaron el crédito a Abengoa para construir Palmas Altas, por cuanto tienen claro que la primera opción, y la que ven más factible, es que sea la Universidad de Loyola la que se quede con todo el complejo y asuma toda o parte de la hipoteca pendiente.
Según recuerda dicho diario digital, la Loyola tiene contrato para permanecer en Palmas Altas hasta 2019, y fuentes de dicha Universidad explicaron este lunes que “por múltiples razones, entre otras que Palmas Altas no nos sirve como sede universitaria” abandonarán el complejo con una probabilidad del 95%, recordando que, además, la parcela que ocuparían en Dos Hermanas ya está urbanizada y que incluso empezarían el próximo curso a impartir clases de forma provisional en el edificio cedido por el Ayuntamiento nazareno y que se encuentra en el Parque de Investigación y Desarrollo Dehesa de Valme, en Entrenúcleos.
El pasado mes de abril, el rector de la Universidad de Loyola, Gabriel Pérez Alcalá, y el alcalde de Dos Hermanas, Francisco Toscano, comparecieron de forma conjunta para despejar dudas en torno a la posibilidad de que dicha institución privada renunciara a levantar su campus en el término de Dos Hermanas y se estableciera de forma definitiva en Palmas Altas, donde en la actualidad ocupa ya tres edificios.
Por entonces, el rector de la Loyola fue claro: "En 2018 necesariamente tenemos ya que salir de Palmas Altas, porque no vamos a caber". Que era una forma de indicar que para el comienzo del curso universitario de ese año ya estarían abiertas las puertas y aulas de dicho campus nazareno.
Pero una cosa son estas palabras y otra las presiones que, según ha publicado el digital 'andaluciainformacion.es', está ejerciendo en las últimas semanas las entidades financieras -especialmente Caixabank y Banco Popular- que en su momento otorgaron el crédito a Abengoa para construir Palmas Altas, por cuanto tienen claro que la primera opción, y la que ven más factible, es que sea la Universidad de Loyola la que se quede con todo el complejo y asuma toda o parte de la hipoteca pendiente.
Según recuerda dicho diario digital, la Loyola tiene contrato para permanecer en Palmas Altas hasta 2019, y fuentes de dicha Universidad explicaron este lunes que “por múltiples razones, entre otras que Palmas Altas no nos sirve como sede universitaria” abandonarán el complejo con una probabilidad del 95%, recordando que, además, la parcela que ocuparían en Dos Hermanas ya está urbanizada y que incluso empezarían el próximo curso a impartir clases de forma provisional en el edificio cedido por el Ayuntamiento nazareno y que se encuentra en el Parque de Investigación y Desarrollo Dehesa de Valme, en Entrenúcleos.
DH DIARIO DIGITAL / REDACCIÓN
