Ir al contenido principal

Yo también

Dos Hermanas Diario Digital se hace eco en su Buzón del Lector del artículo remitido por Fran García Parejo, coordinador local de IULV-CA Dos Hermanas, en el que aborda la situación actual en Cataluña. Si lo desea, puede escribir a doshermanasdiariodigital@gmail.com exponiendo su queja, comentario o sugerencia, e incluso acompañarla también de alguna fotografía.



¿Por qué no iba a decir algo sobre el tema del año? En todos lados, en todas las situaciones, todas las personas han opinado, hablado o dicho algo sobre la situación de Cataluña, yo también quiero hacerlo.

Es difícil no caer en los tópicos, hacer un comentario propio sin que parezca una copia o basado en los que ya existen. Hace ya mucho que 'el procés' estalló, cada cual que se retrotraiga a la fecha que quiera porque esta es una situación que nunca nadie, ningún gobierno, parece que haya querido afrontar. Quizás por miedo a levantar algunas alfombras y que de debajo surgiera un tipo de 'ultra' que en estos días vemos o quizás por falta de iniciativa, capacidad o valentía. Siempre he tenido algo de –sana– envidia a los pueblos que luchan por su autodeterminación. Cataluña, o una parte de ella –de una forma o de otra, mejor o peor– , lucha por su soberanía por sentirse un extremo contrarío a Andalucía, sus avances son tantos que consideran que no deben ser compartidos, que han alcanzado un nivel de vida que los hace incompatibles al resto del Estado del que forman parte. Andalucía, como decía, es lo contrario, si hay una nación, un pueblo, un territorio (elige lo que te guste más) que vea empeorado su calidad de vida, su día a día, es Andalucía, de ahí mi sana envidia. Me gustaría ver al pueblo andaluz en la calle (como he visto al Catalán) gritando que las cosas deben cambiar porque aquí no aguantamos más. En lugar de eso me sorprendo leyendo en periódicos que la principal preocupación de las andaluzas y los andaluces es el independentismo catalán, por detrás, incluso, del desempleo.

A pesar de esto no soy nacionalista, no defendería una independencia. Tengo una idea distinta de Estado. Yo, y la organización a la que pertenezco, formamos parte de un grupo de personas que no nos alineamos con ninguno de los dos grandes frentes que cada día aparecen en los medios de comunicación. Creemos que todos los pueblos que forman España tienen un encaje cómodo en una República Federal. Esto, aunque haya quien intenta constantemente hacer ver lo contrario, no es ir en contra de ningún interés, bienestar o futuro; es una opción más, una posible solución. Nos quieren hacer ver que solo hay dos opciones: la de ser español o antiespañol. No es la primera vez en nuestra historia que se utiliza esta estrategia, por eso deberíamos ser lo suficientemente maduros en lo democrático como para entender que esa simplificación absurda va contra toda lógica y convivencia en democracia. Entiendo que este mensaje no está llegando a la mayoría de la población, entiendo que hay una gran parte de esta que no sabe que existen vías de solución que no son las de imponer nada de forma unilateral, entiendo que para los medios es muchos más atractivo contar la tensión que las vías de la distensión.

Es por esto que sí coincido con el exsecretario general del PCE Paco Frutos en que la izquierda no está sabiendo llevar este mensaje, pero también creo que éste no llega asistiendo a manifestaciones convocadas por la ultraderecha y aportando una vergonzosa colaboración para el blanqueo del fascismo.

España, a mi parecer, es un Estado fallido. Esto que puede sonar muy duro y hasta fuera de tono, no es algo tan grave. Las normas que un día nos dimos para la convivencia no han tenido los mecanismos necesarios para dar una solución no impuesta al primer conflicto grave que se le ha presentado. Esas normas no han evolucionado en 40 años -si obviamos los cambios realizados para el beneficio de unos cuantos, como la reforma del art.135- para adaptase a la realidad de un país que, según sus dirigentes, avanzaba hacía una modernidad jamás vista. Esas normas que un día nos dimos y que, en teoría, eran coyunturales porque la situación de 1978 así lo requería, nunca han dado el siguiente paso. Nunca hemos terminado la mal llamada transición y hoy nos encontramos en un callejón sin salida –o de difícil localización–, en el que volvemos al escenario de los vencedores y los vencidos.

Votar nunca debe ser una mala opción, la legalidad vigente no son normas divinas intocables, la represión y la imposición no tienen largos recorridos y menos en la convivencia, porque, de eso va todo esto, ¿o no?


FRAN GARCÍA PAREJO,COORDINADOR LOCAL DE IULV-CA DOS HERMANAS
© 2020 Dos Hermanas Diario Digital · Quiénes somos · montilladigital@gmail.com

Designed by Open Themes & Nahuatl.mx.