Un total de 1.079 aves de 41 especies diferentes fueron monitorizadas mediante anillamiento durante el año 2022 en la Laguna de Fuente del Rey dentro del proyecto de seguimiento de avifauna de la Sociedad de Ciencias Aranzadi. De ellas, 848 ejemplares corresponden a nuevos anillamientos y 231, a recapturas de especies ya anilladas.
En el pasado 2022 se realizaron un total de 24 jornadas de anillamiento. Las especies más comunes en este enclave nazareno fueron la ‘Curruca capirotada’ y el ‘Mosquitero común’, migradores invernantes en la zona. También se hizo seguimiento de individuos de especies como el ‘Colirrojo tizón’ o el ‘Jilguero lúgano’, menos habituales. Entre las recapturas, las especies más comunes son el ‘Cetia ruiseñor’ o el ‘Mirlo común’, ambas reproductores residentes. Cabe destacar además tres recapturas de mosquiteros comunes portando anillas extranjeras, todas de Bélgica, uno de los cuales fue recapturado dos veces: una primera vez en marzo y otra durante su invernada en noviembre.
Realizar el seguimiento de la biodiversidad en su entorno es posible gracias a que en 2019 la Laguna de Fuente del Rey se incorporó al proyecto de seguimiento de la avifauna mediante el anillamiento científico, convirtiéndose en una Estación de anillamiento de Esfuerzo Constante.
Un hecho singular detectado durante el otoño de 2022 fue la abundancia de mosquiteros comunes durante el otoño, que duplicaron su número con respecto al año anterior. En medio de una sequía excepcional, y dado el carácter particular del humedal, la Laguna de Fuente del Rey pudo haber servido de atractivo para esta especie insectívora ante la escasez de recursos en los alrededores.
La estación de anillamiento contribuyó además al proyecto de Monitorización de Aves Invernantes (Emai), al que le siguieron el de Monitorización de Aves Nidifcantes (Eman), el proyecto Ibermuda, el proyecto Tarso, y los proyectos Tempnet y Mismatch, de la Estación Biológica de Doñana. Julio Rabadán González y José Antonio Sarrión Salado son los anilladores expertos de la Sociedad de Ciencias Aranzadi responsables de su funcionamiento.
Marcar aves de manera individualizada
El anillamiento es una actividad científica que consiste en marcar un ave de manera individualizada, mediante anilla metálica, en la cual consta un remite y un código alfanumérico, único, con el que se identifica a cada ejemplar de manera unívoca. A través de las recapturas de los individuos marcados, al identificar de qué ave se trata, dónde y cuándo se anilló, se puede estimar su supervivencia, tiempo de estancia en un lugar, movimientos, determinar si ha ganado o perdido peso o si ha cambiado algún rasgo de su morfología, plumaje o condición, entre otros aspectos.
En definitiva, ayuda a conocer mejor las poblaciones de aves que se encuentran en la Laguna, ya sean aves residentes o aves migradoras que utilizan este enclave como lugar de paso, de invernada y de cría.
Dentro de los objetivos prioritarios del proyecto está también la formación de nuevos anilladores, ya que se requiere de una formación técnica altamente especializada que suele durar varios años, la divulgación científica y la educación ambiental mediante la participación de voluntarios y la colaboración en diversas actividades con los vecinos y visitantes de la Laguna de Fuente del Rey.
En el pasado 2022 se realizaron un total de 24 jornadas de anillamiento. Las especies más comunes en este enclave nazareno fueron la ‘Curruca capirotada’ y el ‘Mosquitero común’, migradores invernantes en la zona. También se hizo seguimiento de individuos de especies como el ‘Colirrojo tizón’ o el ‘Jilguero lúgano’, menos habituales. Entre las recapturas, las especies más comunes son el ‘Cetia ruiseñor’ o el ‘Mirlo común’, ambas reproductores residentes. Cabe destacar además tres recapturas de mosquiteros comunes portando anillas extranjeras, todas de Bélgica, uno de los cuales fue recapturado dos veces: una primera vez en marzo y otra durante su invernada en noviembre.
Realizar el seguimiento de la biodiversidad en su entorno es posible gracias a que en 2019 la Laguna de Fuente del Rey se incorporó al proyecto de seguimiento de la avifauna mediante el anillamiento científico, convirtiéndose en una Estación de anillamiento de Esfuerzo Constante.
Un hecho singular detectado durante el otoño de 2022 fue la abundancia de mosquiteros comunes durante el otoño, que duplicaron su número con respecto al año anterior. En medio de una sequía excepcional, y dado el carácter particular del humedal, la Laguna de Fuente del Rey pudo haber servido de atractivo para esta especie insectívora ante la escasez de recursos en los alrededores.
La estación de anillamiento contribuyó además al proyecto de Monitorización de Aves Invernantes (Emai), al que le siguieron el de Monitorización de Aves Nidifcantes (Eman), el proyecto Ibermuda, el proyecto Tarso, y los proyectos Tempnet y Mismatch, de la Estación Biológica de Doñana. Julio Rabadán González y José Antonio Sarrión Salado son los anilladores expertos de la Sociedad de Ciencias Aranzadi responsables de su funcionamiento.
Marcar aves de manera individualizada
El anillamiento es una actividad científica que consiste en marcar un ave de manera individualizada, mediante anilla metálica, en la cual consta un remite y un código alfanumérico, único, con el que se identifica a cada ejemplar de manera unívoca. A través de las recapturas de los individuos marcados, al identificar de qué ave se trata, dónde y cuándo se anilló, se puede estimar su supervivencia, tiempo de estancia en un lugar, movimientos, determinar si ha ganado o perdido peso o si ha cambiado algún rasgo de su morfología, plumaje o condición, entre otros aspectos.
En definitiva, ayuda a conocer mejor las poblaciones de aves que se encuentran en la Laguna, ya sean aves residentes o aves migradoras que utilizan este enclave como lugar de paso, de invernada y de cría.
Dentro de los objetivos prioritarios del proyecto está también la formación de nuevos anilladores, ya que se requiere de una formación técnica altamente especializada que suele durar varios años, la divulgación científica y la educación ambiental mediante la participación de voluntarios y la colaboración en diversas actividades con los vecinos y visitantes de la Laguna de Fuente del Rey.
REDACCIÓN / ANDALUCÍA DIGITAL
